ESCUELA DE AMOR
Y SALUD
Y SALUD
Entre un grupito pequeño
comenzaron la aventura,
de una bendita locura
(cuerpo y mente
estimular).
Entre árboles y aves
con ejercicios
suaves.
Voluntarias entusiastas:
Con la
inspiración de Amparo,
la firmeza de Isabel,
la simpatía de
Ascensión,
la honestidad
de Asunción
y buena disposición.
El grupo empezó
a crecer
con seguidores honestos
que cada día están dispuestos,
con sonrisas y con gestos,
alegría y
estimación,
a entregar el corazón.
Hacer personas felices
todo lo que se propone:
Y este grupo se dispone
a exhalar una sonrisa
que a otros pueda contagiar
y ayude al bien realizar.
Se ven encuentros alegres
con abrazos y emoción
que traspasa la razón.
Y se entrega el corazón
con sencillez y humildad
para dar felicidad.
Una familia numerosa
Donde se da sin cobrar
y se quiere contagiar
una bendita ilusión,
(armonía,
sosiego y calma)
que cure el
cuerpo y el alma.
JUBILADOS EN EL 2012
Los jubilados de ahora,
en infinidad de
casos,
vieron una España en guerra
y muchísimas
privaciones
al transitar la posguerra.
Perdieron a familiares
que se encontraron en medio,
de maldades o batallas,
que crearon alambradas
y plantaron grandes vallas.
Y quedó mucha miseria,
muchos seres con secuelas;
Injusticia, necesidad,
trauma y taras sicológicas
fruto de la
necedad.
Después vidas de trabajo
de familia y de hogar;
(Cuando no la emigración)
mejoró la economía
con esfuerzo y con tesón.
A los hombres y mujeres
de vida tan
agitada;
Una nueva
situación
de respeto y democracia
nos trajo jubilación.
Y montados en la atalaya
que proporciona la edad;
La acumulada experiencia
de contiendas y
fracasos
que más que saber es ciencia.
Miramos como se corre
tras señuelos que
muestran
los que dirigen
la fiesta.
Que los jóvenes no alcanzan
porque empinada es la cuesta.
Sin saber que es el esfuerzo
en la buena dirección
que obtiene los resultados,
que busca la juventud,
de que están necesitados.
DESGRACIAS, SIEMPRE
DESGRACIAS
DESGRACIAS
(Invierno de 2012)
Allá por el mes de marzo
nos hablaban de
sequía,
de los pantanos sin agua,
de inminentes restricciones
y que en tierras de la Mancha
no podían sembrar melones.
Qué a estaciones de esquí
el cielo no manda nieve;
y en entorno inadecuado
llegan pocos esquiadores
(a pesar de los cañones)
a esperar tiempos mejores.
Nos enseñan los incendios
hasta perecían personas
que el fuego los devoraba.
Y en Cataluña y Galicia
toda la alarma saltaba.
Nos machacan con la crisis,
hablan mal de las reformas.
se quejan de los recortes.
Siquiera gustan las formas,
todo dicen trae miseria
y hasta protestan las formas.
Y cuando llegan las lluvias
también aparecen males:
más accidentes de tráfico,
no salen las procesiones,
perjuicio a la hostelería
y muestran inundaciones.
¿Por qué callamos aquello
que puede beneficiarnos?
¡El agua de los pantanos!
¡Los incendios que se apagan!
¡La humedad para los campos!
Lo bueno no se propaga.
Permitir a un ser
nacer
es una acción impagable:
es dolor y es placer
creo para cualquier madre.
Ver a carne de su carne
donde fijar su mirada.
Sentir que quiere tocarlo
y besarlo ilusionada.
Y ver que tiene unos ojos
con los que puede mirarla;
Y verá flores a manojos
y la belleza admirarla.
Le oirá el corazón latir
cuando en su pecho descansa.
Podrá el tacto compartir
al tiempo que lo amamanta.
Podrá pensar y sentir.
estimar y ser amada.
Y sabrá que es compartir
y sentirse enamorada.
Y contemplará estrellas
que pensará al mirarlas:
aunque pueden ser muy bellas
no podremos visitarlas”.
Decidirá de su vida
al despertar la mañana,
después de noches dormida,
viendo el sol
por la ventana.
Será libre y
responsable,
con creencias e ideales
dentro de un mundo entrañable
libre de todos los males.
Y feliz y
agradecido
por haber podido nacer.
Por lo que ha recibido
y cuanto pueda aprender.
Será un ser entrañable,
que tomará y dará al mundo.
Con un talante agradable
vivirá cada segundo.
SUELE SUCEDER
Hay quien camina en la vida
disfrutando cualquier cosa:
El sol, la lluvia,
el viento...
Sabiendo que es posible
la tristeza y el contento
y vencer dificultades,
con esfuerzo y con talento.
Asfalto, aglomeraciones,
la campiña y
sus trigales.
árboles de hoja
caduca
o encinas y
olivares.
Sabiendo que cada cosa
tiene sus bienes y males.
Y que todo ser viviente
tiene sus necesidades:
pues se han de alimentar
y también reproducirse.
Unos han de respirar
y otros han de conformarse
con vivir dentro del mar.
Los prados han de brotar
para pastos del ganado
y las nieves derretirse
para volver a ser agua
y con otra agua fundirse.
Pudiendo hacerse vapor
para en lluvia convertirse.
en su camino hacia el mar,
se topa con los
pantanos
que los hombres construyeron
para los usos
humanos.
Y así en cualquier empresa
obstáculos encontramos.
A humanos y
otros seres
parecen gustarle
cosas,
que una y otra vez repiten.
Pero quizá pueda ser
que probar no
se permiten
otras mieles, otras rosas
por no
saber ni que existen.
En un entorno cambiante
hay cosas que permanecen:
El aire que respiramos,
el sueño de cada noche
y otra vez nos despertamos.
Y estrenamos nuevo día
hasta que de aquí marchamos.
EL REALISMO DE
LAS COSAS
LAS COSAS
Hoy en día los poetas
deben decir la verdad:
La luna no se enamora,
es un satélite más.
Y todo el pueblo gitano
que estudie y
trabaje más.
Y así la guardia Civil
los dejaría de mirar.
Las cigüeñas no hacen hoyos
para muertos enterrar,
Pues tienen dificultades
para vivir y anidar.
Y que puede ser bonito
dar barniz a las personas,
pero también hay momentos
que puede perjudicar
cunado han de salir al mundo
y su dureza encontrar.
El realismo de las cosas
lo tenemos que aceptar
y aquella lluvia romántica
ya no la vemos igual.
Cuando volamos tan alto
que no nos podría mojar.
Y todavía las estrellas,
cuando no hay
polución,
siguen alfombrando el cielo.
Y creemos que son
bellas
Porque estando tan lejanas
Poco sabemos de ellas.
Y escribiendo
de la mar
se puede decir que es brava,
que es frescura agradable,
y hasta oleaje
infernal.
Y cuando su agua es rizada
es caricia maternal.
Y las rojas amapolas
que vemos en el trigal,
no nos han de enamorar;
porque parientas cercanas
son convertidas en droga
para personas humanas.
Y hay cosas que no cambian:
Sigue floreciendo el campo
con color e intensidad.
Que las abejas
visitan
para su miel
fabricar
y la lluvia nos visita.
¿CUIDAMOS LO QUE
SE DICE?
SE DICE?
Lo que no quieren escuchar
¿Es necesario decirlo?
quizá debas suprimirlo
para a otros no molestar.
Es de todos bien sabido
que lo que es desfavorable,
no resultará agradable
y por tanto mal venido.
Eso no quiere decir
que se han de negar verdades,
que muestran necesidades
y, para no decirlas, mentir.
Pero las más de las veces
en coloquios rutinarios
por sólo hacer
comentarios
nos excedemos con creces.
Y tampoco es aceptable
el convertirse en
pelota
y dar brillo hasta la ropa
que es del todo censurable.
Creo que la solución
está en no hablar por hablar,
algunas veces callar
y vivir con discreción.
Y pensar lo que se dice
a veces es razonable.
Y no decir lo detectable
la conversación bendice.
Y aunque vistas con harapos
debes cagos desterrar
y palabras encontrar
que sustituyan los tacos.
Hay quien a cada momento
dice
cagarse en tal cosa,
que es una forma horrorosa
de mostrar su descontento.
La poca fluidez mental
quiere fuerza aparentar
y hace tacos pronunciar
por limitación verbal.
SAN JORDI
Por las tierras catalanas
a cualquiera que preguntes
te hablará de la leyenda
de un valiente caballero
que venció a al
feroz dragón,
que pedía y
exigía
y al pueblo atemorizaba
con amenazas cada día.
Aunque sea una leyenda
es de lo más ejemplar
que alguien luche contra el mal
para al débil
proteger.
Hoy también se necesita
que no falte decisión
para detener
maldades
y al bien darle protección.
Es deseo del ser humano
el sentirse protegido,
que será más valorado
si no le piden a cambio
dinero o sometimiento,
porque es
historia real
que en esta bendita tierra
se ha de luchar contra el mal.
¡Y es romántico y es bello!
¡El regalo de las rosas!
¡El obsequio de
los libros!
¡La cultura y la belleza!
en un abrazo fundidos.
La atención al ser querido,
si la extendemos al mundo
algo habremos aprendido.
Pero hay más; mucho
más.
La historia de
Jorge, el hombre.
La hazaña del militar.
La vida del caballero.
La convicción del cristiano.
La generosidad del Santo,
que entregó una vida
que hoy se
recuerda tanto.
UNA PAREJA
Con la mente y corazón
hice mi proposición
y que yo fuera aceptado
mejoró la situación.
Pues estábamos de acuerdo
en lo más
fundamental,
que es amar y respetar
y una familia formar.
Con similares creencias
e idénticos ideales.
Nos dimos el corazón
olvidando rituales.
Ambos éramos felices,
desconocíamos el miedo
y que llegara nuestra
boda
se convirtió en anhelo.
Y llegó el día soñado
en Granada capital;
Montamos en una nube
que a Málaga quiso llevar.
Nos hayamos en el tren
con una pareja igual,
que iban de luna de miel.
El hecho fue casual.
En un coche de caballos
los cuatro recién casados,
fuimos por calles de Málaga
con gestos de enamorados.
El final del recorrido
en el hotel Continental
fue donde nos instalamos
para vivir y soñar.
Y fueron varios los días
sin de la nube bajar.
Nos trataban de señores,
mejor no se podía estar.
Con la pareja de Cádiz
en situación similar
(la del coche de caballos)
fuimos a orillas del mar.
También a Torremolinos,
disfrutando más y más.
Seguíamos en la nube
sin querer de ella bajar.
en un hecho irrepetible.
Uniéndonos para siempre
con felicidad increíble.
En entorno inigualable
Y compañía ideal
Pasamos días felices
Que nos gusta recordar.
TREVÉLEZ PUEBLO
DE SIERRA
DE SIERRA
Para aspirar y sentir
aire limpio y aroma pura;
cielo, naturaleza, altura
a Trevélez se ha de ir.
Con ancestrales costumbres,
piedras, blanco caserío,
cauce y laderas
de río
y sol y nieve en sus cumbres.
Allí se siente
la paz
que flota del propio ambiente
donde se forjó una
gente
laboriosa y
servicial.
Se ven y
huelen jamones
por casi todas sus calles,
y en conjunto y por detalles
son buenas las
sensaciones.
Y al llegar al medio día
si se entra a un restaurante,
se disfrutará al instante
de buena gastronomía.
Se acabará la jornada
tras un día formidable,
con emoción agradable
y energía renovada.
Y si, se decide hacer noche
cerca de tantas estrellas,
el cielo
alfombrado de ellas
de belleza es
un derroche.
Y disfrutar de otro día
de la calma y
de la brisa
recobrando la sonrisa,
dada quizá por perdía.
Y en un bello atardecer
de oxigeno recargados
tranquilos y entusiasmados
marchar pensando en volver.
Y La Alpujarra ir dejando
de montañas y arbolados,
cortijos
abandonados
y Trevélez recordando.
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