DÉCIMO GRUPO DE POESIA (De Tomás Martín Cifuentes)

IMPREVISTOS PREVISIBLES

El ser humano comienza
al iniciar su existencia
una vida programada
con bondades y exigencia.

Y como tantos caminos

tiene tramos favorables
y subidas empinadas
con rampas insoportables.

Y al recorrer esos tramos

de cierta comodidad,
se han de guardar energías
para la  dificultad.
 
Y eso se ha de aprender
y alguien lo ha de enseñar
porque las facilidades
no acostumbran a durar.

Y la, mejora de las cosas

por técnica y por inventos
reclama, a veces, tributos
que producen sufrimientos.

Porque aun estando  atento,

en el ir hacia el destino,
algún riesgo insospechado
puede tronchar  el camino.

Y no se puede olvidar

que, aunque no sean frecuentes:
Coches, Aviones, Barcos, Trenes...
Pueden tener accidentes.

Y  catástrofes naturales

también se han de producir,
y tocará a mucha gente
sus consecuencias sufrir.

Y existen muchas personas

que de ellas se depende.
Y se  dan fallos humanos,
Aunque  por qué, no se entiende.

Por eso también la mente

debiera ser entrenada
para   que en la hora amarga
no se sienta desbordada.

Es preciso ser conscientes

que viajes, mundo y libertad,
lleva consigo sus riesgos
y no solo comodidad.

Lo no deseado ocurre

en un momento cualquiera,
y con ello,  llanto y  pena,
cuando menos se le espera.
 
Y llega aquel accidente
o catástrofe natural:
con  muertes, con destrucción,
y... descontrol emocional.

Todos  los medios informan

como es su obligación,
y crean en las audiencias
dolor y consternación.

Y una, otra vez y otra...

La tele es persistente.
Repiten tanto la imagen
que llega a ser deprimente.

Y algunos medios se pasan...

Yo no entiendo las razones...
Juegan con los sentimientos...
¿Por qué  tantas repeticiones?

Y muestran a familiares:

Deprimidos... Destrozados...
Indefensos...Llorosos, tristes...
De si mismo abandonados.

Nada puede justificar el,

exceso de información
que crea sentimientos tristes
y aumenta la depresión.

Si la vida ha de seguir

y... Catástrofes... Accidentes...
Mutilaciones... Muertes...
Se harán de nuevo presentes.

¿HA BAJADO EL NIVEL
 ÉTICO-MORAL?

Teniendo en cuenta los hechos
que se vienen publicando,
el nivel de honestidad
parece que está bajando.

Hay Políticos y banqueros

que, usando mal sus cargos,
se llevan  dinero injusto
Y no se logra encontrarlo.

Y hasta hoy los votantes

fieles han permanecido
por creer que ese dinero
financiaba su partido.

Y piensan que esos dineros

lo donan los empresarios
por afinidad política
y temor a los adversarios.

Y porque algunos de ellos

no son del todo honestos
(en las cosas a su alcance)
no cumplen con los impuestos.

Despiertan la picaresca,

las ayudas y subvenciones,
y expertos en defraudar,
dan forma a sus decisiones.

Y al no estar del todo limpios

no se toman decisiones
para retirar su voto
a los de las  comisiones.

Quien no declara alquileres

defrauda en la. vivienda
y cobra o paga sin Iva,
ya no cumple con Hacienda.

Decir que hay  corrupción,

y que habrá poca sanción,
mucho ayuda las tertulias
y a cualquier conversación.

Y han de hacer horas extras

los jueces y los fiscales
y son los protagonistas
en los tiempos actuales.

Y si el problema es

haber bajado el listón.
¿Ustedes creen que los jueces
pueden ser una excepción?

Aunque ha de ser posible

que los jueces investiguen
y dicten justas sentencias
que los delitos castiguen.

LOS  Y FINES Y LOS 
MEDIOS

Aunque haya quien critica
que se hagan donaciones,
para tranquilizar conciencias,
yo aplaudo las donaciones.

Porque a enfermos de lepra...

¿Creen que les importa

de donde viene el dinero

que su curación comporta?

Lo que quieren es curarse

y olvidar la enfermedad,

pero saber, por qué y como,

nunca fue  su prioridad.

Curarse   es el objetivo

pero se han de tener medios
que permitan conseguirlo
con los mejores remedios.

Pero hay muchos enfermos

que no se pueden curar 
porque no existen remedios
o no se pueden pagar.

Bueno es que los deseos,

sean justos y  legales,

y poderlos conseguir

con actuaciones normales.

Los buenos y justos fines

sean o no programados

se ha de llegar a ellos

por procedimientos honrados.

Pero éstos no se consiguen

porque sean muy deseados,
y sí... por rumbo sostenido
y esfuerzos continuados.

Pero lo que no existe

no puede ser conseguido
por ello se ha de tener
un objetivo definido. 

Como no es aconsejable,

luchar por algo imposible,
(si  no nos vienen impuestos)
fijarse  retos  posibles.

EUFORIA Y PESIMISMO

Desde que era  muy pequeño

siempre quise destacar,

sin saber las consecuencias,

que ello podía comportar. 

Quería correr más que nadie,

siempre actuaba sin pensar,

me caía muchas veces.

Y me volvía a levantar. 

Reaccionaba por impulsos,

tenía muchos accidentes,

parecía buscar  el riesgo.

¡Las heridas eran frecuentes!

Mi madre y mis hermanas

decían que era muy listo,

decían que era travieso.

¡Era como el abuelito!

Con compañeros y amigos
de los juegos disfrutaba,

(con Julio y con Miguel)

muchos tiempo yo pasaba.

Sin que nadie me mandara

yo leía y estudiaba,

y al sentir como aprendía,

yo mismo me  motivaba.

Mis mejores cualidades:

intelecto y comprensión;

físico poco atractivo,

era mi preocupación.

 Y con el  poco atractivo,

que yo  podía presentar,

el asunto de la novia

se pudo solucionar.

 El trabajo fue de campo

de catorce a veintinueve;

trabajo que era constante 

menos con lluvia y con nieve.

Cuando yo deje la escuela

comencé a colaborar,

en los trabajos que había

en la empresa familiar.

 Y tras contraer matrimonio

fue el momento de emigrar

y me quedé en Barcelona,

donde volví a trabajar.

Fue buena mi adaptación

a vender y repartir,

y pronto recibí oferta

para un grupo dirigir.

 Hacía lo que me gustaba.

Me esforzaba cada día

y las ventas aumentaban.

(mucho entusiasmo ponía)

Seguía como de pequeño

sin valorar el peligro,

sin límite en el horario;

¡aquello era el delirio!

Y las ventas aumentaban,

también la remuneración;

llegaban felicitaciones.

¡Sentía la satisfacción!

Y terminaron  los éxitos.

La calma había de llegar

y las ventas se estancaron.

Y empezaron a bajar.

Se perdieron las euforias,

había malas sensaciones,

las palabras eran tensas,

¡bajaron las comisiones!

Resultaba más difícil

gestionar la adversidad.

Había malas sensaciones

y cierta incomodidad.

Y que difícil resulta

motivarse y motivar,

con  el objetivo tan lejos.

¡Queríamos abandonar.

MIENTRAS VIVO  EN BARCELONA

La vida de un jubilado

(resuelta su economía)

puede decidir que hacer

con su vida cada día.

Y conservar la salud

es algo que debe hacer

procurando no enfermar

y así menos padecer. 

Eso en mi caso se da

me respeta la salud

y me agrada convertir

la necesidad en virtud. 

Rígido por naturaleza

y cumplidor del programa:

bebo  agua a las siete

para volver a la cama. 

A las once a desayunar:

leche, higos,  cereales...

A continuación gimnasia

con ejercicios suaves.

Cuando  los días son impares

me subo en la bicicleta.

(se suspende la gimnasia)

Voy a la Barcelonesa. 

Vivo el ambiente de playa,

aspiro  el olor a mar,

soy uno de aquella gente

hasta que he de regresar. 

He de ducharme de prisa

que me espera la comida

y después para el Casal

que he de jugar la partida. 

Regreso otra vez a casa.

(miro que cena se guisa)

Hablo algo con mi esposa...

Nos vamos los dos a misa. 

Después de cenar verdura.

(la tele se ha de mirar)

Un momento en el despacho

y a la cama a descansar.

Esto pasa en Barcelona

En Sitges será otra historia.

¿En Pampaneira? paz y gloria.